La acumulación de residuos hace peligrar al arrecife
A pesar de las figuras de protección de la zona, de su importancia y riqueza, el arrecife de la ZEC Acantilados y Fondos Marinos de la Punta de la Mona está en grave peligro por la actividad pesquera no sostenible y el fondeo libre. Cientos de sedales, redes, nasas, cabos, neumáticos, anclas y un sin fin de residuos abandonados en el fondo, tapizan el arrecife amenazando la supervivencia de los corales y de todas las especies que habitan, con consecuencias devastadoras para todo el ecosistema.
De los más de 1000 individuos de coral candelabro que forman el arrecife, un alto porcentaje (73%) se encuentra afectado por la presencia de residuos que llevan décadas acumulándose, y que son en su mayoría, producto de desecho de las artes de pesca y del fondeo libre (93,6 %). Estos resultados ponen en manifiesto una vez más la necesidad de protección de la zona y el control de las actividades desarrolladas en ella.
Los residuos provocan graves heridas, fracturas y necrosis en los corales. Del mismo modo, los fragmentos de coral rotos (muchos de gran tamaño y edad), caen al fondo, donde terminan muriendo debido al estrés y a la inanición. Además de cientos de colonias vivas con daños, hemos identificado muchas zonas, en las que el fondo marino se compone únicamente de fragmentos muertos de coral, contándose por miles, lo que afirma una grave pérdida de biomasa poblacional. Algunos de estos fragmentos tienen más de 70 cm., lo que implica más de 70 años de crecimiento del coral.
Desgraciadamente nos encontrábamos ante la desaparición de una especie centenaria… y decidimos actuar.